Irlanda 2018.
El siguiente reportaje trata de nuestra estancia en
Irlanda durante una semana junto a otros compañeros de 3º de ESO en casas de
acogida en la localidad de Dun Laoghaire.
3 DE FEBRERO
El sábado, a media mañana, un autobús nos recogió en la puerta del instituto para llevarnos al aeropuerto Adolfo Suárez donde salía nuestro vuelo a las cuatro menos cuarto de la tarde. El trayecto duró alrededor de dos horas y finalmente llegamos al aeropuerto de Dublín sobre las seis, ya que al aterrizar allí tuvimos que atrasar nuestro reloj una hora. Nos montamos en un autocar que nos llevó directamente a la escuela Active Language Learning donde nos esperaban nuestras familias de acogida ansiosas por conocernos. Posteriormente, tomamos nuestra primera cena irlandesa a las ocho de la noche, lo que para ellos era extremadamente tarde ya que suelen cenar sobre las 6 de la tarde.

4 DE FEBRERO
Este día no dimos clases en la escuela ya que nos esperaba un largo día de caminata en Wicklow y Glendalough.
Wicklow es un condado (al sur del condado de Dublín) y Glendalough un conjunto monacal cuyos edificios fueron construidos entre los siglos VIII y XII siendo restaurados en el siglo XIX. El monasterio se convirtió en un importante centro de peregrinación. El complejo sufrió varios ataques vikingos.
Por la mañana visitamos un antiguo cementerio que se encontraba al pie de la colina y después de almorzar nos llevaron hasta la cima de la montaña; tuvimos que subir más de quinientos escalones.




5 DE FEBRERO
Este día tuvimos clases por la tarde, ya que por la mañana realizamos un "tour" que empezó yendo en tren hasta Tara Station. Lo que hicimos fue ver Dublín, aunque sin tiempo para entrar a las tiendas ya que íbamos a volver el sábado.


Las imágenes son del puente Ha'penny Bridge que se
encuentra en el centro de la ciudad irlandesa que, como nos explicaron en el "tour",
fue construida por los mismos que construyeron el Titanic.
Este día también visitamos Trinity College, donde se encuentra una biblioteca con estatuas dedicadas a la figura de muchos filósofos. En este curioso lugar se intentaron grabar unas escenas de la saga Star Wars pero el permiso no fue concedido; este hecho obligó a los productores a recrear el escenario en otro sitio.


6 DE FEBRERO
Acudimos a las clases por la mañana y nuestra actividad por la tarde consistió en una visita el National Museum. No formábamos parte de ningún tour, por lo que fue difícil saber qué teníamos delante, aunque todo era muy bonito. Queremos destacar una sección muy interesante dedicada a Egipto.

7 DE FEBRERO
Como el día anterior tuvimos clases matutinas y realizamos una visita por la tarde al pueblo pesquero de Howth. Nos sorprendió lo pequeño que era y la cantidad de gaviotas que había. Una profesora de nuestra escuela nos recomendó probar el "fish and chips" que servían en los restaurantes de esta pequeña población, pero no tuvimos ocasión ya que después de visitar el puerto subimos a una colina para visitar un pequeño castillo situado allí.


8 DE FEBRERO
Por suerte, este día fue más tranquilo que el resto, por la mañana asistimos a clases como de costumbre y por la tarde cogimos el tren hasta Dublín para hacer las tan esperadas compras en la capital. Nos dejaron en la calle principal llamada Grafton Street donde se encontraban los comercios más nombrados e importantes. Compramos souvenirs para nuestros familiares y amigos y muchos de nosotros compramos las famosas sudaderas de la ciudad.

9 DE FEBRERO
El viernes por la mañana fuimos en autobús a Dalkey Village y a Killiney Hill donde nos sorprendió la cantidad de personas que acudían a observar el bonito paisaje junto a sus perros. Asistimos a un teatro lúdico al aire libre donde nos explicaron la historia del castillo de Dalkey. También hicimos una moneda de la época.


10 DE FEBRERO
Finalmente, llegó el día de la despedida. Comimos en Dun Laoghaire y nos recogió un autocar para llevarnos al aeropuerto. Cogimos el vuelo a las siete y veinte y sobre las once ya estábamos en la puerta del instituto junto a nuestros familiares. Sin duda fue una experiencia que ninguno de nosotros vamos a olvidar nunca.

Paula Relaño y Rosa López.